El Castillo de San Jorge es uno de los monumentos más emblemáticos de la capital portuguesa. Su ubicación privilegiada ofrece unas impresionantes vistas panorámicas de la ciudad, el río Tajo y las colinas circundantes. El castillo es, pues, un testimonio vivo del glorioso pasado de Lisboa y desempeña un papel clave en la historia de Portugal.
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Fue el 25 de octubre de 1147 que el contingente militar cristiano encabezado por D. Afonso Henriques, después de un asedio de aproximadamente cuatro meses, entró en la ciudad e izó el estandarte de la cristiandad.
Durante siglos, el Castillo de San Jorge ha sido testimonio de importantes acontecimientos y conquistas. Así, durante la Edad Media, insertado en lo que antaño fue la zona noble, sirvió de residencia real, escenario de fiestas y de algunas ceremonias.
En la época de los Descubrimientos, el castillo desempeñó un papel estratégico en la planificación de las expediciones marítimas que pusieron Portugal en el mapa del mundo. Finalmente, durante la Guerra Peninsular, en el siglo XIX, el castillo sirvió de cuartel general a las tropas británicas y portuguesas, resistiendo los ataques de las fuerzas napoleónicas.
Este símbolo icónico de Lisboa se puede visitar todos los días, siendo un lugar donde se puede disfrutar del patrimonio y aprender sobre su historia. El Castillo de S. Jorge se encuentra en una posición dominante en una de las altas colinas de la ciudad, ofreciendo a los visitantes una de las vistas más hermosas de Lisboa y el estuario del río.
Además de las impresionantes vistas, el castillo de San Jorge ofrece otras atracciones para disfrute de los visitantes. Los jardines del castillo son un lugar perfecto para dar un relajante paseo, sin límite de tiempo, dentro del horario de apertura. El billete también ofrece visitas guiadas en portugués, inglés y español al Núcleo Arqueológico y a la Cámara Oscura. Con el billete la visita al Museo es gratuita y al final se puede adquirir un producto diferente y exclusivo, disponible en la tienda del Castillo de San Jorge.
Ven a verlo desde el Tajo y descubre con nosotros algunos de sus secretos.